Consideramos que enero es un gran mes para desacelerar, pensar, decretar y planificar nuestro 2022 de manera estratégica.
¿Cómo empezás tu 2022? ¿Estás refrescando los pies en el río o la pile y seguís pensando en todo aquello que querías probar y no te animaste en el 2021? ¿Ya tenés un balance de lo que, por algún motivo, no funcionó?
El punto de partida: definir objetivos
Planteá de entrada cuáles son los resultados que esperás alcanzar.
¿Incorporar una nueva línea de productos? ¿Generar un mayor volumen de ventas? ¿Implementar contenido de valor vinculado a tu negocio?
Es importante que los distingas en este primer paso. De esta manera, podrás pensar en la estrategia que llevarás adelante. Parece sencillo, pero implica pensar qué queremos lograr y tomar decisiones para construir un método que nos ayude a conseguir lo que deseamos.
Sabemos lo que se siente porque lo vivimos. No entres en pánico, en cambio, ponele actitud. Pautá objetivos reales, buscá alternativas para alcanzarlos y recordá que todo lo que pueda pasar, es parte del proceso.
¡Amigate con la incertidumbre!
Después, vas a ver que bien se siente tomar el timón de tu próximo destino. ¡Te alentamos a que TE ANIMES a intentarlo!
Próximamente, vamos a estar profundizando en varios métodos de definición de objetivos para que esta incertidumbre nos encuentre bien parados.
Un minuto de silencio para delimitar nuestro público ¿Quién nos escucha?
Muchas veces pensamos que tenemos un público muy amplio, o por el contrario, muy específico. Esta es la ocasión para afianzar o cambiar estas ideas.
Analizá cuál es tu público real y pensá dos veces quiénes son los interesados en tus productos. Así, sabrás si estás dirigiéndote al público correcto.
No olvides que conocer a tus clientes es fundamental. Saber sobre sus necesidades, comportamientos, deseos y qué esperan de nuestro emprendimiento te ayudará a generar empatía y conexión.
Para que tu comunicación funcione a la perfección, la clave es que sepas quién te está escuchando.
El sello que nos distingue: propuesta de valor
Ya conocemos nuestro público, ahora… ¿Por qué deberían elegirnos?
La propuesta de valor es aquello que nos diferencia de nuestra competencia. ¿Qué ofrecemos nosotros que otros no ofrecen?
Reforzá tu sello y brindá algo original para que las personas te reconozcan por ello.
Tené presente que tu propuesta de valor no está únicamente ligada a la característica y calidad del producto que ofrecés, sino también, al beneficio que brindás.
Es CLAVE trabajar en las EMOCIONES y SENTIMIENTOS que tu producto/ servicio provoca.
¡Es importante que conectes con tus clientes!
¿Cómo, cuándo y por dónde nos comunicamos con nuestros clientes?
En este paso, te invitamos a hacer una lista de los canales de comunicación por los que vas a interactuar con tu público.
Instagram se lleva todos los premios. Te recomendamos que analices las métricas de horarios y días, para que tus contenidos lleguen a más personas, no te olvides de los hashtags que te posicionan en la búsqueda y por supuesto ¡mantené tus stories al día! Recordá que el tono, la música y las palabras que uses, también son importantes.
Actualizá tu estrategia de redes, no te quedes únicamente en una sola red social. Existe una gama muy amplia de opciones que te pueden acercar aún más a tu público. ¡Anímate a explorarlas!
¿Cómo llegamos a nuestros objetivos? Estrategia.
Ya estás en condiciones de armar una estrategia conectada con todos los pasos que trabajaste. Ya fijaste objetivos, tenés en claro tu público, reconocés tu propuesta de valor, entendés cómo comunicarla y cómo sintonizar con tus usuarios y clientes.
Recordá que una estrategia es una forma posible para alcanzar los objetivos, puede que tengas que ajustarla o incluso modificarla en el camino. Estará demarcada por todas las acciones (tácticas) que llevarás adelante. Acciones de una estrategia pueden ser: generar alianzas con otros emprendedores, posicionar tu emprendimiento digitalmente, optimizar tu tienda y hasta capacitarte para plantear una buena estrategia.
Tiempo y dinero= Inversión
Definiste la estrategia y la táctica. Es momento de que determines cuál será la inversión para tu emprendimiento.
Cada acción que realices, tendrá aparejado un presupuesto que tendrás que tener en cuenta.
Podemos precisar de recursos de distintos rubros: personal, redes, diseño, packaging, producción y, el que dejamos para el último porque es el más importante, nuestro tiempo.
El tiempo invertido en tu emprendimiento forma parte de la salud del mismo. ¡Decidí cuánto le vas a dedicar!